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Los vaivenes de la industria del vino no paran. Tanto así que las viñas ya están desarrollando su estrategia comercial para enfrentar el 2015, ya que esté traería una serie de desafíos, debido a las complejidades que han experimentado en el último tiempo los mercados de Estados Unidos y el  Reino Unido.

Por ejemplo, las ventas de vino embotellado con destino al Reino Unido registraron una caída a agosto de este año 19,6%, de acuerdo a los datos proporcionados por Vinos de Chile. Este mercado, junto al de Estados Unidos son los principales para los productores chilenos y en conjunto representan el 25% de las exportaciones nacionales.

Afortunadamente, existen otras alternativas para el buen desarrollo del negocio y estás vienen de la mano de China, Brasil, Japón y Alemania. En este sentido, los tres primeros países mencionados suman un cuarto de las ventas de Chile. Con lo cual el desafío es consolidar la presencia de los  vinos chilenos en esos mercados. Por ejemplo, según el último reporte de Vinos de Chile, China registró un alza de 56,88% en el último año, lo que ubica a los asiáticos en el 5to lugar del ranking de exportaciones. En la industria sostienen que a largo plazo desplazaría al líder, que es Estados Unidos.

En el caso de Alemania, las exportaciones hacia este país se han vuelto interesantes. Hoy  se ubica entre los primeros 10 mayores destinos y algunos ya se atreven a señalar que esto irá en aumento. Las cifras son las que originan estos argumentos, ya que la venta de vino embotellado a Alemania aumentó 18,26% entre agosto de 2014 y agosto del año pasado, de acuerdo a datos de Vinos de Chile.

La situación es bastante particular, ya que Alemania está rodeada de grandes y buenos productores de vino como lo son Italia, Francia y también España. Sin embargo, los germanos están consumiendo vino de las tierras chilenas. Un tema a favor, es que el precio promedio de la caja es de  US$34,29, lo cual es muy atractivo para los europeos.